El ministro de finanzas de Japón, Shunichi Suzuki, declaró el martes que su país está observando cuidadosamente el mercado cambiario debido a la depreciación acelerada reciente del yen. El dólar estadounidense superó los 142 yenes, marcando un ritmo de depreciación más rápido contra la divisa norteamericana, acentuado por la divergencia de políticas monetarias entre Japón y Estados Unidos y el incremento en las tasas de interés en Europa. Esto último ha posicionado al euro en máximos de 15 años frente al yen, en 155 unidades.
El Gobierno japonés insiste en que las tasas de cambio, aunque determinadas por los mercados y otros factores, deben mantener una estabilidad. Suzuki expresó en una conferencia de prensa que Japón continuará monitoreando de cerca la evolución de los mercados de divisas y mantendrá una comunicación constante con otros países. Además, señaló que se tomarán las medidas necesarias en política monetaria, a raíz de la reciente remoción de Japón de la lista de vigilancia de divisas de los Estados Unidos.
La depreciación acelerada del yen frente a otras monedas ha sido provocada por la decisión del Banco de Japón (BoJ) de mantener su política monetaria ultraflexible, lo que contrasta con las decisiones de la Reserva Federal de EE. UU. y el Banco Central Europeo, que han señalado planes de aumentar las tasas. Esta divergencia en las políticas monetarias ya llevó al Gobierno japonés a intervenir en el mercado en varias ocasiones el año pasado para mitigar la rápida caída de su moneda. A pesar de estas intervenciones, la depreciación del yen sigue inflando los costos de importación, lo que se refleja en el aumento de los precios para la población. Suzuki aseguró que la reciente eliminación de Japón de la lista de vigilancia de divisas de Washington no afectará la postura del país en cuanto a estas políticas.
Fuente: Investing.